Coneixíem GLENN HUGHES de quan havia estat amb DEEP PURPLE i BLACK SABBATH, la seva veu molava molt, i també els seus baixos. La revista BRUTAL ROCK em va oferir fer la crónica del concert de Barcelona, i la vaig fer amb molt de gust. Ho vaig passar molt bé, el HUGHES em va donar la pua en mà. La crónica és aquesta:
Tengo que reconocer que fui a
este concierto llevada un poco por la curiosidad. Hacía bastante tiempo que no
sabía nada de GLENN HUGHES, pero tenía un gran recuerdo de él de los tiempos en
que estaba con DEEP PURPLE o BLACK SABBATH;
y este nuevo proyecto con JOE LYNN TURNER (ex RAINBOW, PURPLE, BRAZEN ABBOT...) podía ser interesante, me
tentaba ver lo que habían hecho estos dos personajes juntos. El
show empezó con 45 minutos de retraso, no sé el motivo, pero hubiese estado
bien poner a un grupo telonero para esa espera, siempre se agradece...
Aunque en cuanto la banda salió a escena, con un GLENN HUGHES al frente, espléndido, super motivado, derrochando energía por todos sus poros, y un TURNER bastante entregado, fueron a comerse el personal. El resto del grupo lo formaban: J.J. MARSH a la guitarra, Shane Galaas a la batería y Vince DiCola en los teclados. Juntos nos ofrecieron un compendio de temas de viejos éxitos de DEEP PURPLE y RAINBOW y algunos de su nuevo proyecto, HTP, a partes iguales, que fueron intercalándose durante toda la actuación. Empezaron con ‘Hold on’, un rabioso tema, que ocupa el quinto lugar del “HTP 2”, con el que ya nos quedamos extasiados, pues salieron con una fuerza y contundencia que los reafirmó como las grandes estrellas que son, tanto compositiva como escénicamente hablando. Siguieron con ‘Can’t Stop Rock&Roll’, de su primer disco, otro gran himno al Rock&Roll, digno de pasar a la historia, que fue coreada y muy aplaudida por el público. Entonces llegó el gran momento para muchos, TURNER anunció ‘I Surrender’, quizá el hit más conocido de RAINBOW, y toda la sala en pleno cantó la canción al completo acompañando las divinas voces de JOE LYNN y GLENN. Siguieron con dos temas de su último álbum: ‘Losing my head’, una gran composición rockera a base de un ritmo de bajo y batería muy machacón con guitarras provocando cambios de atmósfera muy a lo zeppelin; y ‘Alone I breathe’, otra gran obra en donde J.J. Marsh nos deleitó con unos maravillosos riffs de guitarra y un magnífico solo que nos dejo a todos boquiabiertos. Personalmente, me hubiera gustado oír más temas del HTP 2, pues sólo tocaron tres, para mí de lo mejor de la noche junto con los dos de su disco anterior, pero el show estaba planeado para tocar sus respectivos hits, y debo reconocer que cuando el público se lo pasó mejor fue en las viejas canciones de esas míticas bandas. A partir de ahí fueron alternando temas de PURPLE y de RAINBOW: ‘Mistreated’, ‘Street of Dreams’, ‘Getting Tighter’, ‘You keep on Moving’, ‘Death Alley Driver’, para acabar con la maravillosa ‘Stormbringer’. En algunas ocasiones TURNER desaparecía de escena, momento en que GLENN se marcaba unos solos de voz y de bajo que servían de introducción para el siguiente tema. El punto álgido del concierto fue cuando nos deleitó con una balada de PURPLE a capella, acompañado tan sólo de unos mínimos acordes de teclado, allí demostró que no había perdido ni un ápice de su poderosísima y bellísima voz. Y es que para este señor no pasan los años, sigue moviéndose como una anguila por el escenario, tocando el bajo tras sus extremadas poses rockeras y soltando esos agudos interminables que te llegan a estremecer. Y todo bajo una maravillosa sonrisa de simpatía y felicidad. Y es que la respuesta del público fue fabulosa desde el primer momento, y durante toda la actuación se mantuvo ese entusiasmo y esa complicidad entre él y el público. Y, claro está, lo mismo pasó con JOE LYNN TURNER. ¿Qué puedo decir de él? Tenía a todos sus fans a sus pies, a los que obsequió con cuatro super exitazos de RAINBOW. La mezcla de los dos timbres de voz junto con los arreglos free que habían incorporado a las clásicas versiones, con solos de cada instrumento, en donde podía descatar individualmente cada miembro de la banda, duelos de voces, etc. aportaba una riqueza espectacular a los temas que el público supo agradecer. Como recompensa a nuestro entusiasmo nos obsequiaron con tres bises: ‘Devils Road’ (HTP 1), ‘Spotlight Kid’ (RAINBOW) y una potentísima versión del ‘Burn’ de DEEP PURPLE, que ya acabó con nuestras fuerzas, pero que nos dejó un grato sabor de todo lo que había sido ese fantástico show. Y es que se trata de dos personajes ya veteranos con una extensa carrera a sus espaldas, avalada por una larga lista de material discográfico en solitario, además de las participaciones en las ya consabidas bandas y las numerosas colaboraciones en discos y directos de otros artistas.
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