Vaig anar a aquest festival perquè feia anys que no veia SUICIDAL TENDENCIES, des de 2001, i ja en tenia ganes. Hi vaig anar sola, perquè no vaig trobar ningú que hi volgués anar, però vaig pensar que sent ST em trobaria molts coneguts. I la veritat és que només em vaig trobar el Bolo de SUBTERRANEAN KIDS. Sí que vaig veure penya d’antany, però no els coneixia personalment. ST van estar genials, i MIKE CLARKE em va donar la pua quan vem assaltar l'escenari. Aquí la crònica que en vaig fer per a REUX Magazine. Malauradament l’entrada també era el nom en llista.
El pasado 3 de junio se reunió en la sala Razzmatazz 2 de Barcelona la
flor y nata del Punk-Metal del último cuarto de siglo. Cinco poderosas bandas
venidas de todo el planeta para recordarnos que el Thrash aún está vivo, al
menos para unos cuantos ahí congregados. El Festival empezó puntualmente, a una
hora muy intempestiva y a la que no estamos acostumbrados, las siete de la
tarde. ¡Y de un domingo! Como es de suponer, pocos fans estaban a esa hora en
la sala, y los dos primeros grupos: GOLERS
y DAYGLO ABORTIONS, tocaron para
menos de medio aforo. No puedo contar nada de estas actuaciones, pues cuando
llegué ya estaban descargando THE
ACCÜSED, sólo que los primeros pertenecen a la nueva generación de grupos
trashers y los segundos, en cambio, son ya una de las bandas más veteranas de
Hardcore, y toda una institución para los seguidores de este estilo, pues ya a
finales de los 70 empezaron con este nuevo modo de enfocar el punk que tantos
otros grupos han seguido a lo largo de estas tres décadas. Su obra cumbre, “Feed Us A Fetus” (86),
no puede faltar en las estanterías de los adeptos más harcorianos. Me dio rabia
perderme estos grupos, pues no los había visto nunca y tenía curiosidad. Creo
que eso mismo le pasó a gran parte del público, que empezó a llegar al final de
la actuación de THE ACCÜSED. ¡Sólo
eran las nueve y ya habían descargado tres bandas! Por mi parte, llegué casi al
principio y pude disfrutar de una actuación de lo más trash. THE ACCÜSED venían a presentar su
último trabajo, “Oh, Martha!”, en honor a su esquizofrénica mascota, pero lo
que ahí sonaba me transportó directamente a los 80, parecía que nada había
cambiado, los temas seguían teniendo de todo: ramalazos punks en medio de riffs
metaleros desenfrenados, junto a ritmos harcorianos imposibles de seguir. Lo más raro es que el público no reaccionaba.
Los cuatro músicos, BLAINE COOK (voz), TOMMY NIEMEYER (guitarra), ALEX SIBBALD
(bajo) y STEVE NELSON (batería), descargaban sin parar tema tras tema,
incluyendo muchos de sus clásicos crossovers de finales de los 80, pero la
gente estaba como absorta, pendiente de la escena, y sin ni siquiera liarla un
poco. Realmente me sorprendió, aunque cuando pensé que veníamos de un largo fin
de semana con toda la movida del Primavera Sound por medio, lo comprendí mejor.
Así como el poco aforo que hubo, pues a pesar de que iba llegando gente a
cuentagotas, no acabó de llenarse, y la verdad, era casi increible de ver. Razz
2 no es una sala muy grande… No creo que los creadores del “splatter rock” se fueran muy contentos. Tras
ofrecer un repertorio de viejas y nuevas canciones, mal escogido según unos, y
muy bien según los otros, puntualmente acabaron los susodichos THE ACÜSED, -“reyes del crossover” para
muchos-, sin ni siquiera concedernos un bis. Tampoco el público se lo exigió,
seguíamos en un estado de medio letargo, o al menos a mi me lo parecía… Unos
años atrás la sala se hubiera vuelto loca. Ahora, en cambio, en un momento, se
quedó casi vacía. La nueva norma de prohibir fumar hace estragos, y todo el
mundo salió a la calle para satisfacer su vicio. Pocos fueron los que se
atrevieron a encender un cigarrillo o porro durante el concierto, y aún menos
los que se lo pudieron fumar sin ser vistos por los de seguridad. Al cabo de un
cierto tiempo, ILL NIÑO se presentó
con toda su fuerza. Este joven grupo, ya muy querido por sus fans, hacen una
versión moderna de lo que acabábamos de escuchar, fusionando ese
punk-harcore-metal ochentero, ahora ya tan clásico, con toques latinos (muy en
voga), estribillos Nu-metal y un sonido muy actual. Los americanos salieron a
matar, tenían muchas ganas de pasarlo bien y de hacérnoslo pasar mejor a
nosotros. Seguro que recordaban su anterior visita a nuestro país. Estaban
exultantes y excepto DIEGO VERDUZCO, que parecía un poco más serio, derrochaban
simpatía y ganas por los cuatro costados. El primer tema fue brutal. Pensé que
entonces sí que empezaría de verdad la fiesta. Pero los fantásticos y salvajes
temas de los cinco anteriores trabajos de ILL
NIÑO iban sonando y la gente no acababa de arrancar. El cuarteto delantero no paraba de ir de un
lado a otro del escenario. CRISTIAN MACHADO (voz) no dejó de incitar al
personal, LÁZARO PIÑA (bajo) nos suplicó y amenazó, AHRUE LUSTER (guitarra) nos
ofreció la mejor de sus sonrisas, y ya he dicho que DIEGO estaba muy serio,
aunque en su mirada se notaba que no entendía muy bien lo que pasaba. Mientras
tanto, DAVE CHAVARRI y DANNY COUTO no dejaban de aporrear sus percusiones
intentando subir los temas un escalón más. A medio concierto, CRISTIAN hizo
parar a la banda justo empezar uno de los nuevos temas de su último trabajo “Enigma”,
aún no publicado. Nos preguntó si queríamos escucharlo. Luego le preguntó a
DANNY si lo tocaban o se iban… Se notaba el malestar y a pesar de ello,
siguieron cargando fuerte y derrochando energía para contagiarnos. Este tema sonaba un poco distinto a lo que
nos tienen acostumbrados, por lo que puede que “Enigma” nos sorprenda. Y
a la gente le gustó. Pero el mal fado estaba echado y la sombra del tedio
flotaba en el ambiente. ¡Era tan estraño…! La verdad es que yo lo estaba
pasando bien, al menos durante toda la primera parte de la actuación; el sonido
era poderoso, y aunque no son unos virtuosos, sus temas suenan implacables.
Pero llegó un momento en que ese malestar les estropeó toda la fiesta que
traían montada, y a mi ya me empezaron a sonar a más de lo mismo. No estaban a
gusto y se notaba, paraban los temas, nos seguían preguntando el por qué de
tanta pasividad… No se lo podían creer y el show fue decayendo hasta el final. ¡Una
pena! Y tras la huída rápida para fumar que trae consecuentemente el final de
un grupo, y un tiempo considerable, se oyeron los primeros acordes de la
introducción con que SUICIDAL TENDENCIES
acostumbra a empezar sus actuaciones. El
murmullo se hizo presente, la gente comenzó a reaccionar, todos estabámos
esperando a los más grandes del punk-metal de todos los tiempos. ST, la banda venida de California, nos
obsequiaba de nuevo con su presencia. La conocimos “in live” a principios de los noventa, cuando telonearon por todo el
mundo a los grandes del momento en el Monsters of Rock, ya entonces
sobresalieron, a pesar de la escasa media hora con la que contaban, y fueron
creando fans-adictos por donde pasaban.
Durante muchos años, en este país, sólo se pudo disfrutar de sus
telonajes, aunque al final se salieron con la suya, y en los últimos conciertos
ya han aparecido como cabezas de cartel. Al primer rasgado de guitarras, toda
la sala rugió, aquella gente medio adormecida acababamos de recibir una
descarga eléctrica directa a las neuronas. La bestia al fin despertó, y ya
hasta el final del show nos tranformamos en locos salvajes aullando de placer a
cada inicio de tema, una buena elección de algunos de sus mejores hits, quizá
los más punks de su repertorio, que hicieron saltar al personal como nunca en
toda esa noche. “Join The Army”, “War inside my heat”, “How will I Laugh Tomorrow”,
“Feel like sheet!”, “Lights.. Camera.. Revolution”, “Still Cyco…” y como no, “S.T.”,
el himno… se iban sucediendo una tras otra sin darnos respiro, tampoco lo
queríamos, sólo más, más y más… La banda ya no era la misma. Desde que
partieron TRUJILLO, GEORGE y DE GRASSO, grandísimos músicos los tres, SUICIDAL TENDENCIES ha ido variando de
miembros, y aunque por sus filas han pasado buenos instrumentistas, ya nunca
han sonado como en su formación original. Un lujo de banda que muchos pudimos
conocer y disfrutar, los creadores de estos fantásticos temas, que, al fin y al
cabo, es lo que perdurará. Si digo la verdad, morí de gustazo cuando vi
aparecer a MIKE CLARK, pues en su anterior visita no estaba, y aunque sólo por
ver a MUIR ya valía la pena asistir, la presencia de CLARK y DEAN PLEASANTS fue
una grata sorpresa. También los nuevos miembros, STEVE BRUNNER al bajo y RON
BRUNNER Jr. a la batería nos deleitaron con su simpatía y buen hacer. MUIR
siempre sabe escojer bien a sus acompañantes. S.T. siguieron machacando con temas de su amplio repertorio,
dándolo todo y más, como si de unos veiteañeros se tratara. Todos los allí
presentes exhalábamos una energía brutal y el feed back entre público
y banda fue total y absoluto. Al final de la actuacion, MUIR fue a buscar a los
miembros de todos los grupos del cartel, y así el escenario se llenó con la
gente de GOLERS, DAYGLO ABORTIONS, THE
ACCÜSED e ILL NIÑO y todos
juntos volvieron a descargar “S.T.”,
el gran himno que nos une a todos los SuicidalAdictos. ¡Las caras de toda esa
gente eran un cuadro! Lo que los cuatro grupos no habían conseguido, SUICIDAL lo había ganado con sólo un
acorde. ¡Son los verdaderos “reyes” del crossover-metal! Pero ahí no acabó la
cosa, y MUIR rebosando generosidad, empezó con otro tema, al tiempo que nos
incitaba a subir al escenario. ¡Qué nos dijo! Al instante la peña (incuïda yo,
como no…) empezamos a saltar las vallas. En un momento el escenario se quedó a
tope, creí que lo íbamos a derrumbar.
Estaba tan eufórica que no puedo recordar ni el tema que bailábamos, iba
de un lado a otro abrazándome a los músicos, agradeciéndoles esa fiesta, y
acabé al lado de CLARK (los dos encima de la tarima de la batería, porque parecía que íbamos a re quien me ofreció la pua para tocar conjuntamente el solo final, él al màstic y yo rascando,
tan enérgicament que me hice sangre en los dedos. ¡Qué puedo decir! ¡Un fin de fiesta mejor
es imposible! Amo a este grupo como a muy pocos y espero que no tarden en
volver a visitarnos. Lo único que me supo mal fue la gran apatía que tuvieron
que soportar las otras bandas. Demasiados festivales en pocos días…
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